“El parche mágico”
Los Ronaldos – Saca La Lengua – 1988
GRUPO: Los Ronaldos
TÍTULO DEL ALBUM: Saca La Lengua
AÑO: 1988
FOTOGRAFÍA: Paco Rubio
Primeros de septiembre de finales de los ochenta, día de comienzo de curso y como todos los años acuden sensaciones encontradas. Toca inaugurar tercero de BUP y acudo con la certeza de, este año sí, ser un tío adulto.
Ya en el autobús que nos lleva al colegio a mí y al resto de alumnos que van subiendo cada parada, empiezo a ver caras conocidas. El día se ha levantado fresco, lo que permite a los uniformados alumnos romper su homogeneidad ataviándose con chaquetas que dejan intuir su música favorita, su estilo o su pose a secas.
Demasiado Marlon Brando y James Dean, luce con orgullo cazadora negra de cuero con cremalleras, a lo Rockabilly clásico. También pueden verse chupas beisboleras con las mangas de polipiel que delatan a los Rocker (rockabillys más americanos) y alguna chaqueta M-51 con capucha a lo Mod que la película Quadrophenia volvió a resucitar. Y como no, sube en la siguiente parada Víctor el heavy, con su cazadora vaquera adornada con varias partes metálicas de los mecheros en las solapas. Y no dejo de preguntarme si realmente conocen, aunque sea por encima, la música de los grandes grupos que representan las tribus urbanas que intentan emular.
Hace tiempo que medité abandonar la sobriedad de mi vestuario, y este año me he decidido. El fin de semana di una vuelta por el rastro y conseguí localizar mi objetivo, un parche que adornara la espalda de mi cazadora con la imagen de mi grupo favorito entonces, Los Ronaldos.
Me gustaba su música, me gustaba su estilo y su pose, porque en la vida se puede ser chulo, muy chulo o Coque Malla. El parche además del nombre del grupo ofrecía la imagen de una mujer con la lengua fuera representada en la portada de su nuevo disco ‘Saca la lengua’, haciendo un guiño al logo de los Rolling. Los Ronaldos recuperaron rocanrolazos urgentes y cachondos en un espacio musical donde solo estaba Loquillo frente al blandipop.
Ese parche cambió muchas cosas, lo tomé como amuleto. Me añadió a mis destrezas +3 en confianza y +4 en popularidad. Me miraba al espejo y notaba un brillo especial en mis ojos, una sonrisa más blanca y un aliento que parecía que me había comido un rosal. En definitiva, mi chupa de Ronaldos me convirtió en otro hombre. Quizá, en el HOMBRE. Con ella fui capaz de acercarme a ella, a otras, a casi todas, solo o rodeado de mis colegas, e invitarles a Kronenburg, la cervecería de Francisco Silvela con General Oráa, donde empezaba el fin de semana, o a la última en Graf (María De Molina, 50) antes de la retirada.
El álbum que os traemos hoy, Saca la lengua, se lanzó al mercado en 1988 con un Coque Malla al que le quedaban meses aun para alcanzar la mayoría de edad. Un genio. Guitarras atronadoras y descaradas acompañan unas canciones que se hicieron himnos en aquella época. Qué vamos a hacer, Adiós papá o Saca la lengua se escuchaban y bailaban en todos los garitos de moda.
Con mi cazadora engalanada con ese parche estuve años acudiendo a bares de todo tipo porque Los Ronaldos siempre fueron un grupo aparte, respetado por todos y adorado por menos de los que se merecían. Al menos ellos pueden presumir de haber tocado la fama, sus eternos teloneros, Los Enemigos, no pueden decir lo mismo.
Nunca hay que subestimar el poder del vestuario… que se lo pregunten a Batman o Spiderman
Espero que consiguieras ser un adulto ya acabado el BUP, y si no, no hay problema seguro que más tarde lo has conseguido!
El artículo guay y los Ronaldos y su música también, aunque he de decir que mi canción preferida de este grupo, y para mí un himno, «No puedo vivir sin ti»
Y por último con respecto a lo comentado del vestuario si nos dejamos llevar por el refranero..»El hábito no hace al monje»
Ahí lo dejo!!!