“Mejor que la viagra”
Los Hermanos Dalton – Vitamina D – 1996
GRUPO: Los Hermanos Dalton
TÍTULO DEL ÁLBUM: Vitamina D
AÑO: 1996
FOTOGRAFÍA: J. Palacios
Corría 1996… Bueno, con el tiempo, me he dado cuenta de que los años, en esa época, volaban más que correr, se teletransportaban más que volar.
Intentémoslo de nuevo.
1996. Los años 80 se han acabado (algo obvio, por eso es 1996… con 9) y la música, a mi efervescente y juvenil entender estaba perdiendo fuerza. Las Spice, George Michael, Eros Ramazzoti y, por aquí, éxitos menores de Danza Invisible, como ¡A sudar!, los primeros trabajos de Mikel Erentxun sin Diego Vasallo y, salvo, Los Rodríguez, para mí, poco más reseñable.
Andaba yo por esa época muy poppie y a la caza de recopilatorios de bandas americanas y británicas (sí, me dio por ahí ¿algún problema?), y poco activo en lo que a música española se refiere. En las relaciones intergéneros, tres cuartos de lo mismo, ni fu ni fa. En las relaciones laborales, baste decir que llegué a ese mercado cuando a Felipe González se le ocurrió la feliz idea de los contratos basura. Vamos, resumiendo, que mi vida era bastante gris. Pero hete aquí, que pongo la radio y unas potentes guitarras me hicieron salir del ostracismo, saltar a la calle, buscar la primera tienda de discos y comprarme el Vitamina D de Los Hermanos Dalton. Un total de 17 canciones potentes, aceleradas, guitarreras que me pusieron las pilas y consiguieron que me volviera a emocionar lo que escuchaba, que las relaciones intergéneros fueran mucho más fructíferas y satisfactorias y que el tema laboral me la trajese al pairo.
Los Hermanos Dalton me sacaron de la rutina musical y me hicieron feliz. Escuchaba el Vitamina D y quería compartirlo, que los demás disfrutaran de lo que había “descubierto”.
La portada del disco es un bote de pastillas tumbado y con su contenido desparramado. Las cápsulas de vitamina D, de color naranja, invitan a escuchar los pildorazos creados por los gaditanos (son de San Fernando, para ser más concretos). Te curan de la mediocre cotidianidad, renuevan tus fuerzas y son, en definitiva, mejor que la viagra; cosa que yo no he probado, pero que el corresponsal indie consume como si fueran pastillas de leche de burra.
De todos modos, lo que más me gusta de Los Hermanos Dalton es que siguen activos, muy activos y el jueves tendréis oportunidad de comprobarlo en estas mismas páginas. No han perdido un ápice de su fuerza y siguen vomitando canciones que te invitan al salto más que al baile y eso es de agradecer. Invitan a pedirte otra birra y eso lo agradecen los hosteleros. Invitan a conocer a las que saltar a tu lado y eso es una bendición.
Los Hermanos Dalton permanecen fieles a su estilo y son capaces de levantarle el ánimo a un cadáver. Y si no me creéis, pinchad el Vitamina D.
Los mas grandes!!! De lo mejor que ha dado este pais en power pop. Increblantables 30 años despues. Los sigo desde el primer disco 1993 y me han acompañado toda mi juventud, Hay siguen ! Larga vida a los Dalton !
Que ataque más gratuito. Has perdido un lector.
En la próxima crónica le contestas como se merece. Si tu fan número 1.😜
Los Dalton no hay duda que te ponen las pilas.
Esperando con ansia el concierto del jueves.
Me alegra mucho que al cronista le rescatarán los Dalton de ese gris letargo.
Guay la crónica y mal el ataque al Indie. Vive Dios!!
Como siempre la música sacando de los agujeros negros de nuestra vida. Ole por los Dalton y cualquier otro u otra que te ponga las pilas o te haga llorar, pero que te libere de la «grisura». Me encantó la crónica.
PD: no os metáis con el corresponsal Indie que como le perdamos como tal os mato.