«El Corresponsal Espectador Anónimo»
Crónica del concierto de 84 – La Riviera – 27/01/2024
GRUPO: 84
UBICACIÓN: Sala La Riviera
FECHA: 27 de enero de 2024
¿QUÉ DEMONIOS HAGO YO AQUÍ?
El título de este estupendo rocanrol de Los Zigarros, describe perfectamente la sensación que experimenté durante la noche del sábado, desde que me iba aproximando a las inmediaciones de la sala La Riviera, hasta que salí por la puerta, una vez finalizado el concierto de la banda 84.
La sorprendente e insultante juventud del 99% de los asistentes al evento, me hizo dudar si esa noche La Riviera estaba celebrando la fiesta de fin de curso de alguna universidad privada (lo cual es jodido cuando tienes la edad del rector), o si realmente, como yo pensaba, se celebraba un concierto de pop-rock, incluido en la programación de Inverfest.
Pasados veinte minutos de las 21 h, creí que por fin saldría de dudas, pero el comportamiento de una buena parte del público asistente durante el concierto, no me ayudó a salir del bucle espacio-temporal en el que me encontraba.
Una vez expuestos los antecedentes, vamos con lo que de verdad importa, y es la actuación de una banda de música pop.
Reconozco que la trayectoria del grupo 84 me pasó completamente desapercibida hasta hace un par de años. La edición de un disco recopilatorio trufado de colaboraciones llamó mi atención, y me encontré con un repertorio de pop amable, con textos un tanto ingenuos y sencillos, pero agradable a la escucha. Ni más… ni menos, lo que no es poco, dado los tiempos que corren de autotune y bases pregrabadas. También me informé que el nombre del grupo alude al año de nacimiento de sus tres miembros, lo que implica que estos chicos ya son unos “cuarentones” (hecho que no hace sino acrecentar mi desconcierto acerca de la edad media de sus seguidores), y que, tras gozar de un éxito relativo en la primera década del siglo, estuvieron inactivos durante unos cuantos años, hasta su nueva reunión.
Arropados por cuatro músicos: bajo, batería, guitarra y teclados (toda una banda en sí misma), el trío compareció en el escenario, para atacar el primero de sus temas. La sala presentaba buen aspecto, rozando el lleno, y durante casi dos horas, hicieron las delicias de sus entusiastas seguidores. Entre los músicos de apoyo, destacaría la presencia de Sergio Valdehíta a los teclados y de Pere Mallén a la guitarra solista, veteranos de mil batallas, auténtico lujo en el escenario.
Como ya he expresado, no soy un experto en la discografía de 84, pero tengo claro que no se dejaron en el camerino ninguno de sus temas más celebrados; incluso su oda a esta gran ciudad, “Esquinas de Madrid”, sonó un par de veces: la primera ejecutada a capela por la concurrencia, y la segunda, convenientemente instrumentada. Algún pequeño desajuste instrumental y un sonido en ocasiones regular, muy propio de las características de la sala, apenas fueron perceptibles por la muchachada, algunos, como por desgracia viene siendo habitual, más pendientes de su charleta y del selfie definitivo, que del artista al que supuestamente han ido a escuchar…
Dado el carácter de celebración que para el grupo suponía este concierto, en algunos de los temas compartieron escenario con apariciones “estelares”, pero dado mi desconocimiento de cierto panorama musical, me es imposible citar a ninguno de ellos.
Para los bises, y como manda el reglamento, dejaron sus temas más emblemáticos y primigenios, cerrando con “El Burdel de las Sirenas”, un buen tema poprockero, con múltiples referencias cinéfilo-musicales.
En resumen, celebrar el regreso de una competente banda, de la que solo cabe esperar que el paso a la edad “adulta” de sus miembros, deje su poso en los textos de sus nuevos temas (con la edad se recomienda no abusar del dulce), pues el secreto de las melodías pegadizas ya lo dominan.
Y para terminar con otro título de canción (esta del insigne Bunbury), diría que 84 tienen “La Actitud Correcta” …
Hasta la próxima.