«El Corresponsal Espectador Anónimo»
Loquillo – El Último Clásico – 2019
ARTISTA: Loquillo
TÍTULO DEL ÁLBUM: El Último Clásico
AÑO: 2019
EL TÍTULO ES LA RESPUESTA
Apenas unos meses antes de que “lo imposible” ocurriese de verdad, y el mundo se tomara un largo y doloroso respiro, varios de los músicos de rock españoles con más solera y prestigio sacaron disco: 091, Mikel Erentxun, Quique González, Josele Santiago, Coque Malla… y por supuesto, D. José Mª. Sanz Beltrán – Loquillo-.
Este maravilloso CD-álbum, editado como si de un vinilo se tratara, señalizando cara A y cara B, contiene un estupendo cuadernillo interior con fotos de Jaume de Laiguana. Está compuesto de una decena de temas, sin que sobre ninguno de ellos. Para este trabajo, aparte de sus compositores “de cabecera” (a excepción de Sabino Méndez, a quien reserva para su siguiente disco), se incorporan otros autores, que, aunque en principio podrían parecer algo ajenos a su universo, terminan por zambullirse de lleno en este: Leiva, Santi Balmes (Love of Lesbian) y Marc Ros (Sidonie).
No podía faltar la producción impecable e implacable de Josu García, y el buen hacer instrumental del resto de la troupe habitual: Igor Paskual, Alfonso Alcalá, Laurent Castagnet… además de contar con arreglos de cuerda y metal para algunos de los temas.
El álbum abre con “Los Buscadores”, invocación a los referentes de cómic, literatura y cine que hicieron soñar a más de una generación, y de paso, inculcaron ciertos valores que, por desgracia, van cayendo en desuso (honor, lealtad, honestidad…). Los siguientes títulos también constituyen una declaración de intenciones, a la vez que son sumamente descriptivos respecto a la trayectoria vital y artística del personaje conocido como Loquillo: “Somos lo que Defendemos”, “El Último Clásico”, “Los Sonidos Son Ideas”, “Creo en Mí” o “El Resucitado”, por citar algunos.
Pero, sobre todo, se trata de un disco de buen rock & roll, salpicado con algún toque soul, y, a pesar del título, está impregnado en su totalidad de un sonido moderno a la vez que intemporal; las poderosas guitarras de Igor y de Josu planean constantemente sobre las melodías, dejando ese sello inconfundible presente en toda la discografía del de El Clot, desde los tiempos de Los Trogloditas.
La presentación en directo quedó obviamente interrumpida por la maldita pandemia, pero, aun así, Loquillo protagonizó algunos hitos importantes, como ofrecer un concierto benéfico (con todas las medidas de seguridad posibles) en el Wiznik para 1.700 personas en pleno mes de julio de 2020, recién terminado el confinamiento.
El siguiente disco no se hizo esperar demasiado, contando el obligatorio paréntesis, y en 2022 saló a la luz “Diario de una Tregua”, en el que Sabino Méndez vuelve a tomar relevancia en las composiciones.
En cuanto a sus conciertos, evidentemente, los años no han pasado en balde; la voz ya no es la misma (nunca fue un cantante excepcional), pero es plenamente consciente de sus limitaciones y de sus virtudes. Eso sí: el carisma sigue intacto, y el escenario sigue siendo como el salón de su casa. Por otra parte, la furia troglodita ha dejado paso a una banda igual de contundente, o incluso más potente, pero mucho más precisa y virtuosa. Y, sobre todo, lo más importante, el repertorio de hierro con el que cuenta este tipo hace que muy poquitos le puedan mirar a los ojos.
Confiemos que el Loco continue por muchos años complaciéndonos a sus seguidores (e irritando a sus detractores) … ladran, luego cabalgamos.
Luis Guilló
Corresponsal Espectador Anónimo… más de cuatro décadas viendo, escuchando y sobre todo, disfrutando de la música.