“Jaime, VinylRoute te necesita”
Gabinete Caligari – La culpa fue del cha-cha-cha – 1989
ARTISTA: Gabinete Caligari
TÍTULO DEL ÁLBUM: La culpa fue del cha-cha-cha
AÑO: 1989
“Jaime, VinylRoute te necesita”
La noche ya comenzó mal, me entregué a la zoofilia, mi mujer me negó sexo y terminé montando un pollo.
Acabo de soltar esa frase en voz alta en la cola de la pescadería. No sé si por pensar que estoy en un confesionario o por los vapores de la merluza en salsa verde, pero aquí estoy yo, narrando mis miserias vitales a cuarenta grados, delante de tres jubiladas con moño y un señor que atufa a Pachuli y frustración.
Después de la bronca doméstica de aquella noche, decidí bajar al bar de debajo de casa, un lugar que huele a vinagre, a melancolía de fritanga y a sueños perdidos en vasos de tubo mal lavados a mano. Pedí una cerveza. Sin más. Bueno, sin más no, la pedí con el orgullo de quien ha sido expulsado del Paraíso pero quiere evitar que se note. Mis años junto al del batín de seda me hacen moverme con soltura en los bares.
A la tercera caña me fui reponiendo de mi tristeza. Fue entonces cuando entraron un enjambre de chicas de Erasmus, que traían en los ojos la energía de quien no ha conocido aún el dolor de espalda ni la hipoteca. Alemanas, suecas o de Cuenca… no lo sé. Una llevaba una bufanda del Borussia Dortmund, y eso me pareció suficiente pasaporte a la euforia.
Con el desparpajo del que ha tocado fondo y le ha cogido gusto, me acerqué. Usé mi inglés oxidado como quien saca una reliquia de un museo. Ellas reían, yo reía, todos fingíamos que aquel bar cutre era el centro neurálgico de la noche europea.
Y entonces ocurrió. Sonó “La culpa fue del cha-cha-chá” de Gabinete Caligari en el hilo musical (aunque pudo ser mi cabeza, no lo descarto). Me levanté, tomé la mano de la chica de la bufanda amarilla y le dije:
—Dance with me. This song… ruined my marriage.
Y allí, entre servilletas pegadas al suelo, empezamos a bailar un cha-cha-chá improvisado, torpe, pero glorioso, al estilo del alcalde de Madrid.
Ella se acercó a mi oído y susurraba cariñosa palabras que no entendía. Se separó y mirándome a los ojos me dijo: “You are… very funny, Spanish man.”
De vuelta a casa, unas horas después, no pude poner en pie ninguna excusa decente y fui condenado a 25 noches de sillón.
Recientemente leí una entrevista de Jaime Urrutia en la que afirmaba que la canción fue el principio de la separación de Gabinete ya que Edi y Ferni buscaban un sonido más roquero para la banda.
Querido Jaime, somos unos incomprendidos, esa canción es demasiado buena. Ahora solo nos queda la esperanza de que te sumes a alguno de nuestros proyectos delirantes para agruparnos todos los incomprendidos de la ciudad. VinylRoute te necesita, habla con Mayte.