«El Corresponsal Espectador Anónimo»
Crónica del concierto de La Granja – Sala Silikona – 17/06/2023

GRUPO: La Granja
UBICACIÓN: Sala Silikona
FECHA: 17 de junio de 2023

LOS CHICOS (AÚN) QUIEREN DIVERSIÓN

No puedo evitarlo; al igual que me ocurrió hace apenas un mes (con J.I. Lapido), no me sale escribir una simple crónica… por eso aquí va otro panegírico.

(Pasado)

Allá por el Pleistoceno, conocí a estos mallorquines gracias a un tema del cual no compusieron la música; me refiero a “Magia en tus ojos”, versión de “She´s got a new spell” de Billy Bragg (tipo al que yo no conocía en absoluto). Me enganchó tanto la canción que me compré el single, cosa rara en mí – apenas debo tener siete u ocho – pues es un formato que siempre me produjo pereza. En una de esas noches de radio y exámenes (en la Era Pre-Internet) los escuché, seguramente en una fiesta de Radio 3, y creo recordar que llegaron a interpretar el susodicho tema en directo junto al propio Bragg, alternando el inglés y el español. El caso es que enseguida editaron “Azul Eléctrica Emoción” y el enganchón fue definitivo. Incluso la elitista publicación Rockdelux eligió este trabajo como el mejor disco nacional de ese año. Al poco tiempo recuperé su anterior disco, “Soñando en tres colores”, y terminé de flipar. Llegué a verlos en directo, en el Pabellón de Deportes del RM, por San Isidro en mayo de 1990, compartiendo cartel con La Frontera, y recuerdo que Andreu, Marmota y compañía tuvieron que sudar tinta para mantener el nivel que dejaron los insulares … y treinta y tres años después, me reencuentro con mis “granjeros” favoritos.

(Presente)

¡¡Y menudo reencuentro!! Mis expectativas se vieron superadas de largo en cuanto comenzaron a sonar los primeros acordes de “Inés”, tema con el que abrieron la sucesión de cañonazos que componen el setlist actual de la banda. Guitarras nítidas, percusión ajustada y la inconfundible voz de Guiem Porcel, cantando como si hubiera mantenido ésta en formol durante todo este tiempo. Durante una hora y tres cuartos, derrochando entusiasmo y profesionalidad a partes iguales, el grupo demostró estar en perfecto estado de forma. Viéndolos y escuchándolos, cuesta creer que La Granja haya estado en barbecho durante una gran parte de lo que llevamos de siglo, y que (según tengo entendido) sus miembros se dediquen a otros menesteres en su vida diaria. Por si fuera poco, sus temas han envejecido bien, no suenan en absoluto vetustos o rancios, y, en mi humilde opinión, forman parte de lo mejorcito del pop-rock nacional de siempre.

Los litros de sudor derrochados por los músicos fueron debidamente correspondidos por la audiencia; debo decir que hasta cierto punto me sorprendió comprobar la buena memoria de los feligreses, coreando con entusiasmo y devoción todos y cada uno de los himnos que componen el repertorio de los baleares. Y digo memoria porque, por mucha plataforma de streaming que exista, para responder con esa entrega, hacen falta muchas horas de escucha para interiorizar cualquier canción.

Y como todo buen banquete que se precie, el postre debe estar a la altura. En este caso, el postre vino servido por obra y gracia de Vinylroute, que le otorgó un valor añadido a la velada: El Sr. Granados, José María, se subió al escenario para compartir una anfetamínica versión de “El último bar”, sin duda, uno de los mejores temas de la primera época de los míticos (y afortunadamente activos) Mamá.

(¿Futuro?)

Y mientras contamos ya los días que faltan para una nueva visita de esta estupenda banda mallorquina, me queda la esperanza de que más pronto que tarde, “alguien” en este país esté dispuesto a efectuar una “maniobra de resurrección” con La Granja, tal y como ocurrió en 2016 con cierto “grupete” de Granada.